Comunicado de Solidaridad
Ante las amenazas de expulsión del país al P. Andrés Tamayo
1. Las ciudadanas y ciudadanos aglutinados en el Frente Nacional de Resistencia de
Siguatepeque (Honduras), queremos hacer pública nuestras muestras de solidaridad
con el Padre Andrés Tamayo, sacerdote católico que a la fecha, ha venido
desarrollando su ministerio sacerdotal en la parroquia del municipio de Salamá, en el
departamento de Olancho.
2. El Padre Andrés Tamayo, aunque nació en la hermana república de El Salvador, desde
hace 26 años radica en el país, habiendo solicitado al Ministerio de Gobernación el
respectivo trámite para ser aceptado como un ciudadano hondureño (Art. 22 de la
Constitución). Después de varios años de gestión, se le otorgó la nacionalidad el día
24 de marzo del 2006, mediante resolución constitucional que lo declara ciudadano
hondureño por naturalización.
3. En los años que el P. Andrés Tamayo ha radicado en el departamento de Olancho,
junto a su ministerio sacerdotal y como parte de su labor profética de pastor, ha
emprendido una tarea de denuncia en contra de los depredadores del bosque (Art. 37
de la Constitución). En ese sentido, su labor de defensa a los recursos naturales, le
hacen doblemente ser reconocido como un verdadero patriota.
4. En los últimos años, el Padre Tamayo ha realizado su labor de denuncia social desde
el Movimiento Ambientalista de Olancho (MAO). Desde ese mismo frente, el mismo 28
de junio en que se realiza el golpe de estado político-militar en nuestro país, hace
sentir su voz de denuncia ante flagrante atropello a la constitución del país, la que un
día decidió abrazar como cosa propia (Art. 38 de la Constitución).
5. No es de extrañarse que las continuas amenazas ejercidas en contra del P. Tamayo,
tanto por la jerarquía de la Iglesia Católica, así como por las autoridades de facto,
estén ligadas a su papel de permanente luchador porque se restablezca el orden
constitucional en nuestro país.
6. Una vez más, exigimos a la dictadura político-militar, presidida por el Sr. Roberto
Micheletti, el respeto a los derechos humanos, especialmente a la persona del P.
Andrés Tamayo, a quien en este momento se le intimida jurídica y sicológicamente, al
pretender expulsarlo del país, tal como ya lo hicieron el 28 de junio, con la máxima
autoridad de los hondureños y hondureñas; el presidente constitucional, José Manuel
Zelaya Rosales.
7. Finalmente, hacemos un llamado a la comunidad internacional para que esté atenta y
vigilante ante este nuevo hecho de violación a los derechos humanos en Honduras. Y
a la población en general, le invitamos a que se manifiesta en contra de este nuevo
atropello que atenta contra la vida de un hondureño, mismo que carece de
argumentos jurídicos y que no es más que una de las tantas medidas arbitrarias
ejercidas durante la actual dictadura político - militar.
Dado en Siguatepeque, a los diez días del mes de septiembre de dos mil nueve.
¡Morazán Vive, la lucha Sigue!
¡¡¡A setenta y seis días de Resistencia Pacífica, Aquí nadie se rinde!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario